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Docentes Excelentes

Docentes excelentes: ¡Hoy aprendemos con aula_confeti!

<<las margaritas son las flores de las maestras>>

Empecé mi carrera como maestra en la escuela pública en 2009. Desde entonces, he tenido el privilegio de ser tutora en diferentes cursos de Educación Primaria, trabajando en colegios con entornos y metodologías muy variados.

Hace tres años, decidí abrir una cuenta en Instagram como una forma de reírme de mí misma y compartir mis vivencias como docente. Lo que comenzó sin ninguna pretensión ha crecido hasta convertirse en una bonita comunidad con más de 66 mil seguidores. En una de mis publicaciones más emblemáticas, explico por qué las margaritas son las flores de las maestras, y es que, en realidad, la margarita es una flor formada por muchas flores pequeñitas, y así somos las maestras, siempre rodeadas de nuestros niños y niñas. Desde entonces, esta flor se ha convertido en un símbolo para todas nosotras.

¿Cuándo decidiste dedicarte a la docencia y por qué?

No recuerdo el momento exacto en que decidí ser maestra. Siempre he tenido intereses muy variados y mis primeros estudios estaban enfocados hacia el mundo del arte. Sin embargo, la docencia era otra de mis inquietudes latentes. Cuando era jovencita, tuve la oportunidad de trabajar con niños y niñas, y fue entonces cuando descubrí que enseñar me encantaba. Me di cuenta de lo gratificante que era y me atrapó.

La conexión con los peques, el desafío constante de encontrar nuevas formas de explicar y motivar, y la posibilidad de influir positivamente en sus vidas me hicieron entender que había encontrado mi sitio. Además, la enseñanza me permite integrar mis inquietudes artísticas en el aula para crear un ambiente de aprendizaje dinámico y creativo.

¿En qué nivel educativo estás? Infantil, primaria, secundaria… ¿y qué materias impartes?

Soy maestra de Educación Primaria. En estos años he tenido la suerte de conocer todos los cursos, desde 1º hasta 6º, ejerciendo siempre como tutora. Imparto todas las materias, excepto Educación Física, Música, Religión e Inglés.

¿Qué recuerdas de tus primeros tiempos como docente?

Si echo la vista atrás, no puedo evitar sentir cierta nostalgia. Comencé a trabajar a los 23 años en las escuelas rurales del occidente asturiano y de aquella época guardo los mejores recuerdos y anécdotas. Suelo decir que en esas escuelitas «perdidas» encontré mi vocación, la profesión más bonita. Las familias nos mostraban respeto y cariño; los peques eran muy inocentes y entrañables; y los maestros y maestras, casi todos interinos, formábamos una piña dentro y fuera del colegio.

¿Has tenido algún momento “tierra trágame” en la escuela?

Hay muchos momentos memorables. Una de las cosas más surrealistas que me ocurrió, ya fuera de la escuela, fue encontrarme con una exalumna en el baño de una discoteca. En ese momento, es inevitable echar cuentas y darte cuenta de lo rápido que pasa el tiempo.

¿Qué técnica infalible aplicas en el aula para mantener el orden y captar la atención de tus alumnos? 

No sé si existe una técnica infalible, yo desde luego no la conozco. Cada grupo es único y requiere enfoques diferentes. Algo que suelo hacer es utilizar el sentido del humor para captar la atención de mis alumnos y alumnas, creando un ambiente positivo en el aula. En los cursos más bajos, me gusta valerme de recursos conocidos como “Las criaturas silenciosas” o “¿Qué hago ahora?”.

Algo que he notado que funciona bien en cualquier curso es dedicar unos minutos después del recreo a volver a la calma antes de retomar el trabajo. Les pido a los niños y niñas que se sienten en silencio, cierren los ojos y respiren profundamente mientras escuchamos una melodía agradable. Esta técnica les ayuda a relajarse, centrarse y estar listos para continuar con la jornada.

Tema tabletas y móviles… ¿Qué diferencias encuentras entre los niños de antes y los de hoy?

Creo que me ha tocado vivir como docente la gran revolución digital, lo cual supone una responsabilidad y un desafío enorme. En mis primeros años como maestra, el uso de dispositivos electrónicos no era tan común y el acceso a internet era algo más ocasional. En cambio, hoy en día, nuestro alumnado está inmerso en el mundo digital desde una edad muy temprana. Es increíble ver cómo los niños y las niñas de hoy están cambiando su forma de interactuar, comunicarse y entretenerse.

Me preocupa cómo esto puede afectar a su desarrollo, a su capacidad de concentración y a sus habilidades sociales y emocionales. Esta revolución digital nos reta a adaptarnos y a preparar a nuestros alumnos y alumnas para un futuro en constante cambio, promoviendo un uso responsable de la tecnología.

¿Qué es lo más bonito que te ha dicho un/a alumno/a? ¿Y lo más divertido?

Me atrevería a decir que no existe ninguna otra profesión donde te reciban con abrazos, palabras bonitas y miradas de admiración cada mañana. Creo que es lo más parecido al fenómeno fan. Siempre digo que el piropo más bonito lo recibí de un niño de 6 años que me dijo: «Profe, tienes el pelo del color del otoño.» ¡Toma ya!

Y si hablamos de anécdotas, como decía antes, las más divertidas fueron en la escuela rural; eso es otro mundo. Recuerdo cómo en el recreo jugaban a la matanza del cerdo o cómo hablaban apasionadamente de marcas de tractores. En esos años, me hice experta en maquinaria agrícola y también caté chorizos y demás productos chacineros que las familias me traían a las tutorías.

Estos recuerdos no solo me hacen sonreír, sino que también muestran la diversidad y riqueza de experiencias que ofrece la enseñanza en distintos entornos.

¿Qué se te pasa por la cabeza cuando te dicen que tienes muchas vacaciones?

Sé que a muchos compañeros y compañeras les molesta, pero a mí no. De hecho, en @aula_confeti bromeamos mucho sobre el tema. Tenemos menos vacaciones de las que la gente piensa, pero aun así no nos podemos quejar. Sin embargo, en nuestra profesión pasa algo curioso: se nos hace muy difícil desconectar.

Podemos pasar tardes enteras preparando recursos para nuestras clases, plastificando, recortando… La enseñanza es una vocación que implica una dedicación constante, incluso fuera del horario escolar, y eso hace que siempre estemos buscando maneras de mejorar y de ayudar a nuestros alumnos y alumnas. Las vacaciones pueden parecer largas, pero para nosotros, son una oportunidad para recargar pilas y seguir formándonos.

Háblanos de cómo ves el panorama del sector educativo ¿Cuáles son los mayores desafíos a los que tenéis que hacer frente los docentes?

Es curioso cómo, hace poco, pedí a las seguidoras más veteranas de @aula_confeti que ofrecieran un consejo a las compañeras que están comenzando. La respuesta más repetida fue: “Nunca pierdas la ilusión.” Esta respuesta me hizo reflexionar sobre cómo la sobrecarga de trabajo administrativo, la falta de recursos en el aula y los numerosos desafíos que enfrentamos en la escuela y en la sociedad actual pueden afectar nuestra motivación profesional.

Encontrar maneras de mantener esa ilusión y transmitir esa pasión a nuestros niños y niñas, a pesar de las dificultades, es esencial para lograr que el aprendizaje sea una experiencia positiva y enriquecedora para todos. La pasión y el entusiasmo que llevamos al aula pueden marcar una gran diferencia en la forma en que nuestros estudiantes experimentan y valoran el proceso educativo.

En relación a esto último…¡pide un deseo! Quién sabe….

Si pudiera pedir un deseo, sería que se implementaran más apoyos y recursos en nuestras aulas, un entorno educativo bien respaldado y menos papeleo. Contar con el apoyo adecuado y menos trámites administrativos nos daría la oportunidad de dedicar más tiempo y energía a lo que hacemos mejor: enseñar.

Por último ¿Qué te gustaría que te hubiésemos preguntado y no lo hemos hecho?

Es difícil responder a esta pregunta porque podría pasarme horas hablando de mi profesión; es algo que, creo, nos ocurre a casi todas las maestras. Por eso, quiero aprovechar esta oportunidad para dar las gracias por la entrevista y por la posibilidad de compartir algunas de mis experiencias como docente. No me considero un ejemplo de nada, sino simplemente una maestra más que comparte sus vivencias y reflexiones con otras compis en el claustro de Instagram, porque aprender a reírnos de nuestros dramas docentes nos ayuda a mantener la perspectiva y a disfrutar más de lo que hacemos.

Gracias por compartir tus experiencias y reflexiones con nosotros. aula_confeti, hoy contigo, ¡hemos aprendido mucho! 

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